La mayoría de las bodas civiles son la primera parte de un evento mayor: la ceremonia eclesiástica, pero en algunas oportunidades la pareja solo desea hacer el matrimonio legal y por lo tanto, no tendrán la ceremonia más grande. En ese caso ¿Puedo lograr tener una gran fiesta con mi boda civil? ¡Por supuesto! Solo debes tratar tu boda civil como si fuera una religiosa y aquí te decimos un poco de qué tienes que considerar, la novia civil lucirá tan hermosa como la eclesiástica.

De todas formas, no importa si tendrás ambas ceremonias igual puedes hacer que cada una de ellas sea especial. Recuerda que aunque seas una persona muy religiosa sin los papeles de matrimonio civil no podrás casarte por ninguna iglesa.

¿Qué necesito para mi boda civil?

Este trámite legal está limitado bajo la municipalidad en la cual lo realices y normalmente se lleva a cabo en la prefectura o ayuntamiento de tu ciudad. En Venezuela, por ejemplo, tienes que entregar una serie de documentos legales de los novios, los testigos y los padres, y si la pareja tiene hijos deberá llevar también los documentos de ellos. Luego de esto debes fijar los carteles (otro trámite) y a partir de ahí fijar la fecha de matrimonio.

En Venezuela la ceremonia civil es solo en la prefectura, por lo que si quieres una ceremonia para tu matrimonio tendrás que realizarla a parte, justo durante tu recepción o fiesta. Se ha popularizado hacer una pequeña muestra de afecto justo antes del brindis, en la que la pareja puede leer sus votos y tomarse en un acto más público frente a la familia. Lo que importa es que adecues la reunión a tus deseos, ya sea pequeña o grande.

Recepción ¿Grande o íntima?

Hay que sentarse con el novio y pensar ¿Podemos cancelar una ceremonia grande para el civil o no? Un poco de sinceridad en este caso puede ser ideal para poder organizar una perfecta reunión. Recuerda que si tendrás ambas ceremonias puedes dejar que el civil sea más íntimo aunque por eso no tiene que ser malo.

Si elijes una recepción íntima puedes optar por un almuerzo en un restaurante, el cual, por supuesto, decorarás y convertirás en el lugar más hermoso que puedas imaginar. Si por otro lado, quieres hacer algo en tu casa, o la casa del novio, puedes optar por un pequeño brindis, en el que puedas compartir con aquellos más allegados. El secreto de todo esto es no dejarte limitar y tener un día tal como lo soñaste.